Hola a todas y todos,
Semana sucia. Hemos tenido un inicio de semana brutal con lluvias salvajes que nos obligaron a coger embarrados y con toda el agua cayendonos en las costillas. Esto es lo que tiene querer coger la verdura bien fresca. Todo este follón acaba convirtiendose en una dosis extra de barro en las cestas. Suponemos que esta semana no habrán llegado los lechugas suficientemente limpias y quizás algo más tendrá restos de tierra, pero no pudimos limpiarlo más de lo que lo hicimos. También en esta situación se hace complicado cumplir con el trabajo planificado y la cesta la tuvimos que modificar varias veces a lo largo de la mañana.
Apenas hemos terminado de podar y ya estamos aclareciendo. El aclarecer es tirar una parte de la fruta para aligerar la carga en el árbol y para permitir a la fruta que dejamos hacerse grande. Es un trabajo que da pie a profundas meditaciones, ya que es aburrido a muerte. Ahora que si alguien se anima a hacer unas jornadas de reflexión estamos abiertos a acoger nuevas mentes pensantes en el bancal. Un ratito aclareciendo es mucho mejor que unas largas jornadas en un monasterio budista.
Os recordamos que esta semana hemos servido los primeros huevos. Si alguien más se anima a recibir todavía estáis a tiempo.
Recordad que para que esto funcione la información debe tener dos vías.
Saludos y hasta la próxima semana.
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