Hola
a todos y todas,
Hace un
calor que se funden incluso las teclas del ordenador y las pocas ideas que nos quedan aún en pie.
Bien, continuamos recolectando a tope. Por un lado con ganas de acabar con esta
vorágine de recolectar y por la otra rezando
para que dure mucho tiempo y
podamos llenar la cesta de duros.
Como siempre la verdura plantea pocas sorpresas. Ha
comenzado una competición
para ver qué crece más rápido si lo que nos comemos o lo que se pega a los calcetines, también llamada biodiversidad o mala hierba por los aborígenes. De momento como
nos dijo una vez un aborigen "no te robarán la verdura,
no. Si alguien viene a robarla no la encontrará entre tanta hierba" Así
que lo miramos y exclamamos aquello de “qué trabajo que tenemos y qué
calor que hace"
Parece, por
lo que dicen, que está a
punto de comenzar la
revolución. Si haces caso a las conversaciones de bar está todo muy caliente. Pero si haces caso a lo
que se ve al salir del bar la cosa no está tan madura. En
cualquier caso, ante un
posible advenimiento revolucionario queremos contar una anécdota atribuida a Robespierre. Ya avanzamos que debe ser del
todo falsa, pero viene al pelo.
Dicen que
estando Robespierre sentado (probablemente
en un café) pasó una turba de gente dispuesta a empezar la
revolución. El Robespierre al ver esto se levantó y rápidamente se
puso el sombrero. Los compañeros de sobremesa le preguntaron que dónde iba y él respondió que a liderar a la masa. Bueno que cada uno
saque sus conclusiones, pero después no vale lamentarse
de que tuvimos que guillotinar a Robespierre.
Recordad que para que esto funcione la información debe tener dos vías.
Saludos y hasta la próxima semana.
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